El aumento de los incendios forestales cada año está provocado por el cambio climático y el uso de la tierra, por lo que son más frecuentes e intensos. Según un último informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y GRID-Arendal, se prevé un aumento del 14 % para el 2030, un 30 % para finales de 2050 y hasta un 50 % para 2100.
El humo de los incendios forestales llega hasta la estratosfera, donde las partículas van a la deriva durante más de un año y pueden acabar dañando la capa de ozono. El humo contiene sustancias químicas nocivas que dañan las plantas y el suelo, por lo que los bosques son una importante protección natural contra el calentamiento global.
Un reciente estudio del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) ha investigado que dichas partículas que permanecen suspendidas pueden provocar reacciones químicas en la capa de gas que protege la Tierra.
Las partículas en la capa de ozono
El grupo de investigadores del MIT han descubierto una nueva reacción química por la que las partículas de humo procedentes de los incendios forestales australianos empeoran el agotamiento de la capa de ozono. El equipo descubrió que la disminución de la absorción de luz ultravioleta inducida por el humo puede desencadenar esta reacción, que provoca un aumento de los óxidos de nitrógeno y los compuestos orgánicos volátiles. Al desencadenar esta reacción, los incendios contribuyeron probablemente a reducir entre un 3% y un 5% el ozono total en las latitudes medias del hemisferio sur.
Sin embargo, en sus investigaciones van más allá e identificaron que en los grandes incendios se puede desencadenar una reacción que agota el ozono.
Este descubrimiento se realizó gracias a que originalmente las fábricas que emiten compuestos en forma de clorofluorocarbonos (CFC), podían reaccionar con la superficie de los aerosoles de los incendios. Esta reacción produjo que el monóxido de cloro, la molécula que más destruye la capa de ozono. El resultado contrasto su investigación.
No obstante, desde las Naciones Unidas informaron que el agujero de ozono está en vías de recuperación gracias al esfuerzo internacional de eliminar sustancias nocivas que agotan la capa de ozono.